MANIFESTACIÓN 31 DE MAYO
El pasado 26 de mayo los Mossos d’Esquadra, en nombre del Ayuntamiento de Barcelona, procedieron a desalojar un histórico edificio okupado desde 1997.
El
proceso judicial lo puso en marcha el propietario del edificio, Transportes Metropolitanos
de Barcelona (TMB), pero quien toma la iniciativa del desalojo es el
Ayuntamiento de Barcelona como propietario de TMB. Es el equipo de Gobierno del
Ayuntamiento, con el regidor de distrito Jordi Martí al frente, quien considera
peligroso este centro. Y tiene razón, lo es.
“Can Vies” es un reflejo de la necesidad de utopía, entendida
como incitación a rechazar el mundo que nos imponen y como deseo de construir
una posibilidad más alentadora con formas de relación entre las personas
diferentes a las impuestas. La utopía no es un sueño milenarista, que hay que
esperar a realizar en el futuro, sino la suma de deseos y sueños que deben guiar
la construcción de una realidad en la que vivir hoy la revolución creando
espacios de libertad. Es lo que Hakim Bey denomina con las nociones de “Zonas
Temporalmente Autónomas” y “Zonas Permanentemente Autónomas”. La utopía no
existe sino en el presente y el
anarquismo, compatible con otros proyectos utópicos, ha de mostrar su capacidad constructiva al ser capaz de arrancar espacios al
sistema.
MANIFESTACIÓN 31 DE MAYO
Ese
es el peligro que entrañaba “Can Vies” y así lo han entendido miles de personas
que, en numerosos barrios de Barcelona, han intentado resistir al desalojo y la
destrucción del edificio. El día 28 de mayo decenas de concentraciones se
produjeron en numerosas localidades de Cataluña en solidaridad con “Can Vies” y
la movilización, a fecha de hoy, continúa.
La información que están dando los medios de comunicación es atroz, están demonizando al colectivo que en ese centro actuaba, de igual manera, todos los hechos que se han estado sucediendo desde que se autorizó la demolición dan a entender que en Barcelona hay una guerra mundial a la que asisten jóvenes guerrilleros de todas las comunidades españolas y del exterior, principalmente franceses e italianos.
ResponderEliminarAl final todo tiene su respuesta, hacer callar a todo el que quiera responder a los que quieren imponer un modo de vida y de pensar.
Saludos
¿Y te sorprende? La demonización de cualquier movimiento o actuación que se percibe peligrosa, entendiendo esa amenaza tal y como la he explicado, es respondida así. Además no se han limitado a esa demonización verbal, hay muchos detenidos.
EliminarSaludos, Emilio.
ResponderEliminarPor desgracia, me suena... lugares, aunque distantes, comunes.
Tristeza e impotencia.
Besos y un cálido abrazo!!!!
Bueno, hay respuesta y hay un modelo claro de como proceder. Por ejemplo, han rechazado negociar, y también han rechazado los intermediarios políticos que se han ofrecido, con el Ayuntamiento.
EliminarBesos, X.
EliminarParece que han dado marcha atrás desde el ayto... a ver qué pasa ahora... ¿tal vez la excepción a la norma? Ojalá!!
Besos 'punkys'... ;)
Había mucha mucha gente en la manifestación de ayer.
EliminarBesos!!
Los movimientos de revuelta contra el poder son más efectivos y duraderos cuanto mas parcelados están y utilizan mas frentes de lucha. Es entonces
ResponderEliminarcuando fortificadas por ellas se pueden dar respuestas globales como acaba de suceder el domingo pasado.
Un abrazo
No vi ninguna respuesta global el domingo. En todo caso este modelo de Can Vies trata de construir un modelo organizativo y de actuación al margen del modelo existente y predominante. Es una propuesta autogestionada que niega una forma delegada de actuar que es lo que ocurre en las elecciones. Y estas "zonas temporalmente autónomas" pretenden criticar y subvertir las relaciones de poder (me parece que nada de eso hubo el domingo).
EliminarEl poder se genera y brota desde todos los ámbitos de lo social porque le es inmanente. No funciona solamente según el modelo de la ley, también funciona bajo la forma de la norma y es, básicamente, normalizador. Mientras la ley es prescriptiva, la norma es, simplemente, declarativa, tan sólo expresa un conocimiento legitimado, que no nos dice qué debemos hacer sino qué sería normal que hiciéramos. No nos obliga a ser de una determinada manera, sino que nos informa de cómo son, en su mayoría, nuestros semejantes; y si, al compararnos con ellos, resulta que no somos del todo cómo deberíamos ser, procuraremos eliminar o reducir esa diferencia para ser normales.
Se trata de arrancar espacios al sistema para realizar la utopía en el presente. Y desde mi perspectiva, que puede ser errónea naturalmente, nada de eso percibí el domingo.
En todo caso gracias por tu interesante aportación.
Abrazo.
Otra muestra más del visceral temor que el poder siente ante la libertad de acción y de elección ciudadana, por ello escogen practicar la táctica de tierra quemada e impedir que el pensamiento, el arte y la cultura recuperen un espacio que siempre debió pertenecer al pueblo. Un beso.
ResponderEliminarPretenden "desalojar" la cultura y las formas de relación social que tienen otros parámetros. Es como intentar contener el agua en las manos.
EliminarUn beso!!