Hacía tiempo que no abría paso a esta sección más ligera, así que aquí está de nuevo
«A mi aire» (6 octubre)
La posibilidad real de un ataque nuclear controlado
por parte de Rusia me provoca escalofríos, especialmente por la población
ucraniana, pero también por toda Europa. ¿En qué escenario nos situaría algo
así?
Aporta dosis de pesimismo (no sé si es posible más)
a mi percepción de la izquierda silente ante la agresión rusa y las protestas
de los hombres llamados a filas y su entorno.
No sé cómo bailar «a mi aire» ante el panorama que
nos rodea.
Me doy cuenta de que los últimos «a mi aire» han
tenido un tono pesimista, desolado, lleno de incertidumbres, «líquido» …
Me gustaría pensar que es posible revertir la
sensación de «pérdida del norte» que me invade por momentos, descabalgar el
peso del futuro que veo sombrío y que el bienestar y la armonía que siento
cuando veo amanecer perdure más allá de un fugaz instante.
No sé si seré capaz, pero que no desaparezcan esos
instantes en que recupero la vida «a mi aire».
«A mi aire» (20 octubre)
Cuando puedo ir a caminar
temprano acostumbro a salir de casa hacia las 7:00 h. Ahora es de noche, no
amanece hasta una hora después.
En casa me dicen que dónde
voy de noche…
¿Cómo puedo explicar que
me gusta caminar cuando aún es de noche y ver emerger el sol del mar? No me
canso nunca de ver ese espectáculo. ¿Cómo explicar que me gusta caminar por
calles y espigones solitarios? Esas sensaciones que atesoro con fruición (y
otras muchas) forman parte de mi forma de vivir «a mi aire».
«A mi aire» (27 octubre)
Solo la amistad (y mis
ideas de referencia, que no ideología) me hace emerger del pozo del
escepticismo, no tengo muchas amigas/os porque no es fácil construir amistades
que perduren en el tiempo.
Es cierto que, a veces,
aparece alguna persona que desembarca con su amistad en mi vida y eso siempre
es estimulante. También es cierto que pocas de esas amistades fulgurantes
permanecen con el paso del tiempo, seguramente tengo mi parte de
responsabilidad porque mi manera de entender la amistad es, quizás, demasiado
parca en efusividades y sobrada de sinceridad.
Brindo porque las
amistades nos salven de la incredulidad.
«A mi aire» (3 noviembre)
¡¡Por favorrrr, quiero otoño!!
Que este tiempo vuelva a
su ser, que haga fresco, que los colores, los olores, las sensaciones, la calma
del adormecimiento de la naturaleza se vaya imponiendo…
Y sé que esto irá a peor,
el cambio climático no es una broma o una circunstancia puntual, lo hemos
provocado la humanidad (una humanidad más que otras) con nuestra forma de vida
dislocada y consumista inducida por un capitalismo completamente enloquecido y
suicida.
Y mientras tanto nuestra
clase política nos da azucarillos y nos desvía la mirada.
«A mi aire» (10 noviembre)
Me voy reconciliando con el hecho de participar en
actos donde percibo que no está el mismo tipo de personas que era habitual.
Mi participación en el curso de posgrado de la
Universidad Federal de Río de Janeiro ha sido un chute de positividad y de
aprendizaje que no voy a olvidar fácilmente. Los lazos que voy estrechando con
Brasil me proporcionan mucha alegría (y puede haber más sorpresas… que no
desvelo para que no se fastidien).
«A
mi aire» (17 noviembre)
Vida y pensamiento, esa es
la fórmula que cuajó Emma Goldman y la que intento que funcione en mi
existencia. Siempre, naturalmente, «A mi aire»
«A mi aire» (24 noviembre)
Por fin, la lluvia, el fresco, la calma, la armonía
de la naturaleza que entra en fase de adormecimiento y que provocará luego su
florecimiento.
También los seres humanos deberíamos poder disfrutar
de esos ritmos al compás de lo que nos rodea (a poder ser no asfalto, ruido,
prisas, estrés).
Paseo por el campo y lo encuentro mustio, y con cierto desconsuelo no dejo de mirar al cielo buscando alguna señal que anuncie la ansiada lluvia... pero de momento nada.
ResponderEliminarAunque tengo mi blog un poco abandonado, no renuncio al disfrute de leer escritos como el tuyo, que nos incitan a reflexionar, y reclaman algo de belleza en lo sombrío que nos rodea.
Cuídate y un fuerte abrazo, apreciada Laura.
También lo encuentro mustio, está seco y no parece que vaya a llover por el Mediterráneo, esto tiene difícil solución (me refiero al evidente cambio climático).
EliminarCuídate también, Paco. Un buen abrazo.